¡Crisis educativa! Alumnos de secundaria se ven obligados a estudiar al aire libre en Coyuca de Catalán

La Escuela Secundaria Ignacio Ramírez, ubicada en la comunidad de Placeres del Oro, municipio de Coyuca de Catalán, ha iniciado un paro indefinido debido a la falta de electricidad que afecta al plantel desde el pasado mes de mayo. A consecuencia de este problema, los alumnos han tenido que recibir clases al aire libre, en las calles, lo que ha generado una crisis en el normal desarrollo de sus actividades académicas.
Falta de respuesta de la CFE
La situación comenzó cuando el transformador de la escuela dejó de funcionar y, a pesar de las gestiones realizadas por parte de las autoridades locales, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) no ha atendido la reparación. Esto ha dejado a la escuela sin suministro eléctrico, lo que afecta no solo la iluminación, sino también el funcionamiento de herramientas educativas y otros servicios necesarios para una educación adecuada.
Falta de docentes también agrava la situación
A esta problemática se suman las carencias en el número de maestros, ya que el plantel aún no ha sido dotado de al menos cinco docentes necesarios para completar el cuadro educativo del ciclo escolar. Esta falta de personal ha generado malestar tanto en los padres de familia como en el propio personal educativo, quienes exigen una solución inmediata a las autoridades correspondientes.
Alumnos reciben clases en la calle
Ante la negativa de la CFE de reparar el transformador y la falta de personal docente, los alumnos de la secundaria han tenido que adaptarse a la situación y tomar clases al aire libre, en pleno sol, lo que pone en riesgo su salud y su educación. Padres de familia han manifestado su preocupación por la calidad educativa de sus hijos, quienes no cuentan con las condiciones adecuadas para continuar su formación académica.
La postura de los docentes y autoridades escolares
Los maestros de la secundaria han decidido no reanudar actividades dentro de las instalaciones hasta que se les garantice una solución definitiva a los problemas de luz y de personal docente. La supervisión escolar acudió al plantel para dialogar con los profesores, pero estos han mantenido firme su decisión de no abrir la escuela hasta que las autoridades competentes se hagan responsables de la situación.
La comunidad de Placeres del Oro está a la espera de una pronta respuesta por parte de la CFE y las autoridades educativas locales, quienes deben tomar cartas en el asunto para evitar que los estudiantes sigan siendo afectados por la falta de infraestructura y recursos educativos.