“El Monstruo del Castillo”: Redes sociales estallan contra Erik Catalán Rendón en Iguala

A menos de un año de haber asumido la presidencia municipal de Iguala, el alcalde Erik Catalán Rendón enfrenta una ola de críticas sin precedentes en redes sociales, donde usuarios lo acusan de traicionar los ideales con los que llegó al poder. Bajo el mote de “El Monstruo del Castillo”, los señalamientos van desde actos de autoritarismo y censura, hasta el uso de encuestas pagadas para maquillar su imagen.
Lo que comenzó como una administración con discurso humanista y de cercanía, se ha transformado, según sus detractores, en un gobierno de represalias, promesas incumplidas y control mediático.
En diversas publicaciones virales, usuarios denuncian despidos injustificados dentro del Ayuntamiento, persecución hacia regidores que no se alinean con sus decisiones, intimidaciones desde la oficialía mayor y censura hacia la prensa local. Incluso se habla de amenazas a integrantes del cabildo, supuestamente condicionando recursos y personal si no votan a favor de sus iniciativas.
“Nos vendió un gobierno humano y terminó siendo un régimen de manipulación”, expresa una publicación ampliamente compartida en Facebook. Las críticas también apuntan a proyectos no concretados, como el llamado “paseo histórico” que, aseguran, permanece abandonado y con estatuas arrumbadas en bodegas municipales. Otro de los reclamos recurrentes es el paradero desconocido de las fuentes danzarinas, que inicialmente fueron atribuidas a la administración anterior y ahora se sabe que siguen almacenadas sin uso.
En el ámbito de comunicación social, se le acusa de manipular conferencias de prensa al limitar las preguntas a comunicadores afines, y marginar a periodistas independientes. La detención de un reportero local, quien firmó un convenio de publicidad con el gobierno municipal y luego fue acusado de extorsión, encendió las alarmas entre asociaciones de prensa.
Además, hay acusaciones por encubrir a colaboradores señalados por actos violentos o presuntos desfalcos, quienes continúan en funciones pese a las denuncias públicas.
El fenómeno digital ha tomado fuerza a través de publicaciones etiquetadas como “El Monstruo del Castillo”, en alusión a su estilo de gobierno, considerado por los usuarios como autoritario y carente de autocrítica. El apodo circula en redes como símbolo del desencanto con una gestión que, prometiendo transformación, terminó —según voces ciudadanas— por instalar el miedo y el silencio en el Palacio Municipal.
Hasta el momento, el alcalde Erik Catalán no ha respondido directamente a estas acusaciones. Mientras tanto, en Iguala crece el descontento, y las redes sociales se han convertido en el principal canal de denuncia ciudadana ante lo que muchos consideran una administración cada vez más alejada de sus compromisos iniciales.